lunes, 4 de marzo de 2024

Un gobierno oposición ensucia la democracia


La forma de actuar de los miembros del gobierno de Pedro Sánchez sigue inalterable desde que Núñez Feijoo fue nombrado presidente del PP, principal partido de la oposición en España. En algún comentario anterior ya hice referencia a esas sorprendentes actuaciones propias de políticos inexpertos o movidos por el único deseo de no perder sus cargos. Nunca entendí por qué personas de un supuesto alto nivel eran incapaces de actuar sin acusar y reprimir a sus interlocutores.

Con frecuencia veo en TV sesiones del Parlamento Español. Una y otra vez, cuando hacen preguntas al presidente Sánchez o a sus ministras o ministros, las respuestas que dan no se centran en el tema sobre el que les han interpelado, sino en atacar al interlocutor y en muchos casos a su jefe, tratando de difamarle a él y a su partido. En mi opinión, es una forma poco decorosa, sectaria y vergonzosa de ejercer el poder. Deben centrarse en responder a las preguntas en vez de atacar a quien se las hace. El Parlamento está para aclarar a los ciudadanos las decisiones que toma el Gobierno. No es un ring donde se pelean boxeadores, sino un lugar de elaboración de leyes y aprobación de decretos.

Cuando Feijoo accedió al puesto de presidente del Partido Popular de España, ya en su primera actuación en el Congreso de Diputados recibió severos ataques del presidente Sánchez. Ataques que, poco a poco, se fueron propagando entre todos los miembros del gobierno. La estrategia ya estaba entonces centrada en atribuir al oponente del PP los mismos calificativos que populares y miembros de otros partidos daban al presidente y a sus coaligados. Porque, repetidas veces, populares y otros calificaron al señor Sánchez de mendaz, pero este respondió en seguida que todas sus afirmaciones extraídas de las hemerotecas, afirmaciones que no llegó a cumplir, no eran mentiras sino simples cambios de opinión.

Que la política gubernamental se base en atribuir a su adversario las mismas acusaciones que de él recibió, en este caso a quienes ruegan al presidente, o a sus ministras/os, que responda a sus preguntas, es una forma de actuar que da asco y vergüenza a muchos ciudadanos. Si el rival lo acusa de mentir, el gobernante también lo acusa a él de lo mismo. Y si las preguntas se centran en saber si hay casos de corrupción en el partido del Gobierno, los sanchistas se defienden achacando los mismos hechos a sus interlocutores, cuando lo que deberían hacer es centrarse en dar clara respuesta al tema planteado.

Desde que Feijoo está en el primer lugar de la oposición política de España, el Ejecutivo actúa como si fuese un partido oponente y  dedicado a acusar de lo mismo a quienes le interpelan. España, pues, pasa por un mal momento. Confiemos en que no se tarde en recuperar el verdadero sentido de la gobernanza con la presencia de políticos que sepan ejercer sus funciones; políticos bien formados intelectualmente, dotados de buen criterio, fiables y siempre pendientes de resolver satisfactoriamente los problemas de su pueblo, obviando la confrontación personal o partidista con quienes ejercen la oposición. A ver, a ver si España logra recuperar la democracia limpia y plena, alterada en los últimos años.- JT

4 comentarios:

RamónLera dijo...

Es una forma poco acertada y poco seria de intentar anular a los de la oposición. También veo las reacciones a las preguntas que les formulan, se centran poco en ellas en sus respuestas para dar paso al ataque, a descalificativos, al uso, es bien cierto, de los mismos argumentos negativos de la oposición. De ella recibe esas acusaciones que comentas, mendacidad, hipocresía, cinismo, etc, etc, etc, aunque la persona que hace la pregunta no es mentirosa, ni hipócrita, ni na de na de lo que le dicen. Que pena, con estos políticos gobernantes España se va poco a poco al carajo.

Solotu dijo...

Siguen y siguen y no dejan de seguir, tralalí, tralalá. No paran, cada vez que les oigo responder en las Cortes no responden a la pregunta que se les hace sino que arremeten contra el preguntador como si él fuese el culpable del desastre en que nos están metiendo. Fuera, fuera, fuera, fuera¡¡¡¡¡¡¡¡, que se vayan, abandonen, convoquen elecciones porque si se creen que lo están haciendo bien, pues a ver que pasa.

PabloAljor dijo...

Apunto si exagerar: un buEN pOLITICO DEBE SER PERSONA RESPONSABLE Y COMEDIDA, hablar y comportarse como lo hacen ellos y ellas da verguenza. A ver si actuan con seriedad y aplomo, ya estoy harto de ver a unos y otras tomarnos por el pito del sereno,

Curacabras dijo...

ja,ja,ja¡¡¡¡¡¡¡¡¡ dEMOCRACIA, no querrás decir dedocracia. Cada dia que pasa nos acercamos más a la chupandocracia de una izquierda incapaz de ceder pese a sus subjetivas gestiones.QUE MAL VA España con esas personas que nos gobiernan¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡