La risa que resta en vez de sumar.- El Confidencial |
Cuando intervino Feijoo vimos a un Sánchez haciendo gestos de desaprobación. Balanceaba la cabeza, como queriendo descalificar a su oponente, y sonreía tratando de lanzar un mensaje de absoluta desaprobación a las palabras del líder popular. Su comportamiento fue siempre respaldado con fuertes aplausos por los senadores de su partido. No cabía esperar otra cosa. Terminada la larga sesión, reflexioné sobre lo visto y escuchado en el cara a cara entre ambos políticos. Y llegué a la conclusión de que Sánchez va a tener muy difícil ganar elecciones para seguir en Moncloa. Todo apunta a que será rechazado por una inmensa mayoría de los españoles.
No sé quienes son los asesores o asesoras del presidente. Pero observo que esos discursos que le preparan deshonran su figura en vez de elevarla. Que una personalidad de su categoría, la segunda más importante del país, se rebaje poco menos que a discutir con su oponente sobre quien miente más, o que le ataque repetidas veces preguntándose si Feijoo es insolvente en sus conocimientos o actúa de mala fe, en su política de oposición, es un comportamiento para mí inaudito dentro del ámbito del rifirrafe parlamentario en países serios y democráticos como España.
En la sesión de hoy ha quedado claro que los insultos proferidos por ministras y militantes del sanchismo contra el líder popular forman parte de una estrategia deficiente y errónea, tendente a disminuir el espectacular número de votos que las encuestas dan a Feijoo. Lo que se esperaba de la sesión de hoy es que Sánchez fuese explicando con detalle los asuntos objeto de crítica por parte de la oposición, para que los ciudadanos conozcan los beneficios de esas medidas políticas del gobierno. Pero no fue exactamente así. El presidente puso todo su énfasis en desacreditar personal y políticamente al líder popular. Un gran error. Así que, señor Sánchez, escuche el consejo de un ciudadano de a pie: busque asesores que sepan conducirle a la victoria, cambie el rumbo, porque el que lleva hoy le conducirá mañana al más absoluto fracaso.- JT