lunes, 5 de junio de 2023

El cara a cara repetitivo de un perdedor impaciente

Sánchez y Feijoo en el Senado. Foto El Correo

Perdió de manera bastante rotunda. Los resultados de las elecciones municipales y autonómicas del pasado mes de mayo no podían haber sido peores para Pedro Sánchez. Su comportamiento postelectoral dejó decepcionados a muchos de sus votantes. La noche de las elecciones no apareció por la sede del partido. Fue un hecho sorprendente. ¿Sintió vergüenza?, ¿no quiso acompañar a sus compañeros y compañeras por temor a que criticaran duramente el fracaso? Porque, nadie lo duda, la razón de los malos resultados se la atribuyen a él, a su política de gobierno, a sus pactos con grupos poco formados políticamente como Podemos, o antipatrióticos como los secesionistas catalanes o los bilduetarras vascos. Muy pocos entendimos la actitud de Sánchez tras el fracaso de su partido y el de sus coaligados. Pero se lo atribuimos, sin dudarlo, a la incapacidad del personaje para gobernar España con éxito.

Y de ese sorprendente comportamiento postelectoral del presidente pasamos, casi de manera inmediata, a la convocatoria de elecciones generales. Elecciones en plena época vacacional y en ambientes de exagerado calor. Sólo una persona con ánimo de resarcimiento se atrevería a convocar a los electores el domingo 23 de julio. Es un día en el que la gente está de viaje, disfrutando del placer del descanso en playas, montañas y pueblos. Pero ahora, miles y miles de personas se verán obligadas a votar por correo. ¿Hay plenas garantías de que esos votos no podrán ser alterados?

La presentación obligatoria del DNI es una de ellas. Pero, una vez depositados los votos en la oficinas de Correos, ¿qué personas los custodian en ese organismo público y en las unidades de reparto, para que sin ser manipulados pasen el día 23 a las mesas electorales? Cuando el voto por correo alcanza, como en esta ocasión, dimensiones millonarias, ¿van a controlar esa enorme mercancía electoral los partidos implicados para garantizar su inalterabilidad? Hasta el momento nadie ha explicado con detalle cómo se logra la protección de esas papeletas. Es una medida que muchos desearían conocer.

Cara a cara seis veces

El presidente derrotado quiere ahora mostrarnos que posee suficiente capacidad para gobernar el país. Ha invitado públicamente a su adversario, el señor Feijoo, líder del PP, a participar los dos solos en debates televisivos, hasta seis en total, en canales que acepten su propuesta. Feijoo le respondió rápido. No acepta seis debates, pero aún no dijo si con uno estaría de acuerdo. Calificó de excéntrica la propuesta. 

En mi opinión, la del señor Sánchez es una sugerencia estrambótica que está fuera de lo habitual en períodos de elecciones. ¿Por qué seis cara a cara? ¿Tantas ganas tiene el líder sanchista de acusar a su adversario de insolvencia y mala fe, descalificaciones que usó ya en una sesión del Senado? ¿Cree acaso que por enfrentarse seis veces a Feijoo va a ganar las elecciones?

Que haya debates en tiempos electorales es normal. Pero en ellos deben tener cabida representantes de partidos con representación parlamentaria, sean sus líderes u otros militantes destacados de la misma formación. Emitir seis veces un enfrentamiento entre los dos mismos personajes es una forma rara, muy rara, de aburrir al espectador. 

Si damos un repaso a los debates celebrados en mayo en el canal 24 Horas, de TVE, podremos comprobar que sus índices de audiencia estuvieron muy mermados. Los votantes no se paran a ver y oír discusiones que en la mayoría de los casos son intrascendentes. Quieren hechos, soluciones a su malestar. Y muy en especial, la resolución de los problemas que sufre hoy la inmensa mayoría de los ciudadanos, gobernados por personas que en muy pocos casos dan la talla para administrar con éxito la economía y el bienestar del pueblo español.- JT

Mítines monclovitas (06.06.23)

¿Lo han leído ustedes? Desde La Moncloa se lanzan acusaciones e improperios contra el adversario líder del PP Alberto Núñez Feijoo. Son actuaciones sorprendentes e incalificables. En pleno período preelectoral, si se necesita criticar al oponente para que sea rechazado por los votantes, no se debe hacer nunca desde la sede del Gobierno y menos todavía cuando son aún ministros, eso sí, en funciones, como es el caso de Félix Bolaños o de la portavoz gubernamental Isabel Rodríguez.

Estos personajes, si poseen un mínimo de decencia política y democrática, y de respeto a la legalidad, deben hacer uso de las sedes de sus partidos o de cualquier lugar que esté fuera de La Moncloa para poner a parir a sus adversarios, como lo ha hecho hoy el señor Bolaños, un político poco precavido y demasiado audaz. ¿De dónde ha salido? ¿Cuál es la razón por la que Sánchez le haya dado vela en el entierro, dejándole decir y hacer lo que quiere y trasgrediendo preceptos legales? ¿Cómo se permiten estas actuaciones?

Según la ley, una vez convocadas las elecciones se prohíben todo tipo de actos organizados por quienes ejercen poderes públicos, como es el caso de ministros y demás gobernantes, en sedes del Gobierno. Y nunca en actos que contengan, entre otras cosas, alusiones a sus logros, o que utilicen expresiones similares o iguales a las que emplean en sus propias campañas electorales. La sede del Gobierno o la de cualquier ministerio no son espacios autorizados para celebrar en ellas mítines políticos. Eso sí, podrán hacerlo fuera de esos lugares como candidatos o representantes de los partidos en lid por el poder.

Yo aconsejaría al presidente del Ejecutivo que desautorice esas alteraciones de la legalidad. Mitinear desde La Moncloa no deja de ser un quebrantamiento de la Ley Electoral. Si quieren atacar a su adversario en tiempos preelectorales, háganlo como miembros de sus partidos, pero no como representantes del pueblo, en este caso el español. Y no en una sede del Gobierno. Hay lugares en todo el país donde poder hacerlo, sea una plaza, un estadio, un teatro, un hotel, etc. Pero nunca como ministro o ministra. Lo razonable es que lo hagan como candidatos o miembros de partidos que se presentan a las elecciones.- JT